Hay una sensación íntima en estos cantos que evoca una sensación de profunda armonía con el yo. Los arreglos tienen una ligera influencia mediterránea, con guitarra, ritmos suaves y ambiente de teclado. Thomas Barquee aparece en el álbum como productor y tecladista, acompañado por Girish en percusión y Domonic Breaux en flauta.